De este modo, cada uno eligió una imagen del material, la observamos y desde ahí realizamos varias pregunta, hechas por nosotros mismos, para el resto del grupo. Nos ayudamos a realizar más preguntas entre todos y creamos un marcos de discusión muy interesante.
Algunas de las preguntas elaboradas por las y los participantes fueron estas:
-¿Se puede volar como un pájaro? ¿Los seres humanos podemos hacer cosas que hacen otros animales?
-¿Se puede ser feliz haciendo todo lo que uno quiere? ¿Y si lo que yo quiero va contra lo que quiere otro?
-¿Uno vive más libre si vivimos sin padres? ¿Para qué sirven los padres? ¿Me puede querer igual una persona que adopta que una que tiene un bebé biológicamente?
-¿Cuántas normas tenemos las personas pequeñas? ¿Tenemos normas extra en la familia por ser menores de edad? ¿Nos gustan las normas que tenemos que cumplir por ser niños?
-¿Por qué un menor no puede entrar en una discoteca o no puede tener una tarjeta de crédito? ¿Por qué tenemos que empezar a trabajar con 16 años? ¿Nos gustaría trabajar como trabajaron nuestras abuelas y abuelos con 7 u 8 años?
-¿Nos gustaría tener un espacio único en el que nadie más pudiera entrar? ¿Podríamos tener un espacio sin normas o con normas propias?
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| María Ángeles nos preguntó: ¿Cómo nos sentiríamos si experimentaran los animales con nosotros? |
Concluimos la actividad creando nuestra propia ficha tratando de responder más preguntas que salieron en la actividad:
¿Qué me gustaría y no puedo hacer? ¿Qué hago mal y debería hacer mejor? ¿Qué me está prohibido hacer por mi edad? ...
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| Paula nos preguntó: ¿Podemos hacer todo bien? ¿Tenemos que equivocarnos? |
Al concluir la sesión, pedido que entre toda la familias se termine de rellenar los huecos de la ficha con más pregunta hechas entre todos para que el trabajo que empezamos en la sesión se continúe en "espacios de diálogo democrático" en casa. Ahora que seguro sacamos algo de tiempo libre en las vacaciones será más sencillo.
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