Memoria: Café Filosófico 4/2/12 ¿El conocimiento nos hace más felices?

La sesión comenzó con unos 14 participantes, pero aumentó progresivamente hasta 21 a medida que el Café Filosófico se desarrollaba.

Comenzamos nuestro Café Filosófico haciendo la diferenciación entre los tipos de conocimientos:

(Lo que aquí se lee es solo un breve extracto de las cosas que se dijeron el Café Filosófico)

-Conocimiento científico: conjunto de conocimientos, teorías e hipótesis referetnes a un objeto o dominio, producida históricamente, organizada y demostrada lógicamente por un colectivo. El progreso es su esencia no porque salte de certezas en certezas sino porque se desarrolla a través de conjeturas y refutaciones.

-Conjetura/Opinión: Caracterizada por tener valor pero es un saber insuficiente. Amenudo se forma de una creencia aunque más o menos osmos conscientes de esta insuficiencia.

-Prejuicio/Creencia: idea concebida, aceptada sin examen crítico, sin elaboración racional u opinión.

E hicimos una distinción conceptual a 3 términos:

-Prejuicio: (arriba descrito)

-Opinión: parecer formado tras la experiencia. Suponee cierta actividad intelectual ya que se da comparación de situaciones particulares junto con una pequeña reflexión.

-Juicio. Facultad de distinguir lo verdadero de lo falso. Provisto de fundamento racional seguro. Aseveración fundada en la razón.

Salieron preguntas tales como estas:

¿El desconocimiento nos da la felicidad? ¿No se sufre más por las dudas e incertidumbres? ¿Qué es la felicidad? ¿Acceder a herramientas informativas nos provocan mayor felicidad? ¿No será más que felicidad sino satisfacción lo que nos produce el conocimiento?

También tuvimos aportaciones tales como éstas:

Deberíamos hacer una diferenciación: Por un lado existen conocimientos prácticos que nos provocan mayor felicidad por las capacidades que éstos nos reportan. Pero existe un nivel de sobresaturación de información informátizada que nos provoca una sobresaturación de conocimiento que tenemos que adquirir o ir adquiriendo o de lo contrario nos convertimos en "analfabetos tecnológicos".

Las redes sociales han demostrado que tienen una gran utilidad no solo comercial, sino de movimiento de conciencias y de agrupaciones de cientos de miles de personas contra las injustificias.

Hasta hace no mucho tiempo nadie se preocupaba por la brecha cultural o digital de la gente, ahora interesa solo con fines comerciales y es preciso ver esta diferencia.

Existen diferentes tipos de Felicidad, y el consumismo genera una felicidad efímera y que se nutre de compras tras compras.

Tal vez no sea cuanto más sepamos lo que nos hace más felices sino cuando sepamos hacernos la vida más sencilla

Además introdujimos el concepto de Sabiduría que la Filosofía a lo largo de la Historia que dejamos aquí mencionada.
Sabiduría. No es el éxito del que todo lo sabe o trata de aparentar saber. Es quien sabe quien tiene vida y solo se preocupa en vivirla. “Por mí, amo la vida”, Montaigne.
No espera que la vida sea amable, fácil, agradable y por lo tanto la ama.
Nadie es absolutamente sabio, éste lo sabe y lo acepta. Sus fracasos son tan válidos como sus aciertos. La sabiduría no es un seguro a todo riesgo ni una panacea, ni obra de arte. Es una actitud ante la vida. Es serenidad, es alegría, cierta libertad y cierta eternidad porque el sabio vive en el presente: siente y experimenta que es eterno y también de cierto amor.
La sabiduría no es ni una ciencia ni una técnica, se fundamenta menos en lo que es verdadero y más en lo que es bueno para sí y para los demás. La verdadera sabiduría no es un ideal sino un estado, más o menos aproximado.
“Aunque podamos ser eruditos con el saber ajeno, sólo podemos ser sabios con nuestra propia sabiduría” Montaigne